Además del rubro vitivinícola, Rafael Guilisasti tiene un rol en la industria del litio, como presidente de Pampa Calichera, Oro Blanco y Norte Grande, las sociedades cascadas a través de las cuales Julio Ponce participa como accionista principal de SQM. Esta compañía minera ha estado en la palestra pública en los últimos días dado el acuerdo al que la firma china Tianqi llegó con los organismos de la libre competencia, que viabilizan su ingreso con el 24% a la firma. Algo que es resistido por la propia minera y por las cascadas.

-¿Por qué se oponen al ingreso de Tianqi a SQM?

«Porque es un competidor directo. Las medidas de mitigación que sacó la Fiscalía Nacional Económica, el acuerdo, son bastante impracticables y vagas. Tengamos claro que SQM tiene muchos negocios, pero el principal y más atractivo es el del litio. En el caso del mercado del litio, los oferentes son pocos. SQM es una de las tres empresas más importantes de litio y tener un competidor es un problema».

-Pero, esa situación podía pasar al cambiar parte de la propiedad.

«Podía pasar, pero también hay reglas, y la principal es poder clarificar. La fiscalía dio la razón en el sentido de que el competidor necesitaba entrar con ciertas cláusulas, pero hay una ambigüedad entre lo que es la ley general de sociedad anónima y las cláusulas que se adquirieron, porque ¿cuál va a primar? El objetivo era que se aclarara y ser lo más preciso, de tal manera que el gobierno corporativo de SQM no tenga que estar lidiando diariamente con interpretaciones del acuerdo».

-¿Qué opción van a tomar para evitar el ingreso de Tianqi, demanda ante el TDLC, FTC de USA?

«Los caminos de la legislación chilena».

-¿Hasta dónde van a llegar judicialmente?

«Primero está la reconsideración ante la propia fiscalía y después va a haber que pedirle precisiones a la CMF. Hay un acuerdo, pero a nuestro modo de ver no es compatible con las regulaciones generales del mercado financiero. Por lo tanto, también está el camino de pedir aclaraciones y precisiones».

-¿El tiempo les juega a favor?

«Estamos en un proceso completamente legal, se tendrán que ver todos los recursos y, en el mismo proceso, se van a ir dando de tal manera que si ingresa Tianqi, se cumpla fielmente el acuerdo que voluntariamente firmó con la fiscalía».

-¿Existe alguna posibilidad de llegar a acuerdo si se incluyen medidas?

«Tiene que haber un contrato, hay documentos que perfeccionar; el modo de las restricciones y cómo se ejecutan al interior del gobierno corporativo de SQM «.

-¿Cuál es el mejor escenario para la venta del 24%? ¿Qué se atomice la propiedad?

«Este no fue un escenario buscado. Fue muy impredecible, a raíz de la fusión que ocurrió en Potash, que se transformó en Nutrien y que los reguladores chinos e indios lo obligaron a desprenderse de esta participación en SQM. Interesados siempre hay, pero esta venta la dirigió Nutrien buscando el mayor valor, y tuvo un premio muy importante. Es lo mismo que a nosotros nos hace decir que Tianqi, al pagar ese premio, no lo va a hacer para ser un inversionista pasivo».

-¿Tiene conocimiento de algún libro paralelo de otros inversionistas que quieren participar en el remate de acciones de Nutrien? ¿Qué le parece?

«No. Tampoco no es un problema de chinos o no chinos; basta ver el nivel de inversión que está teniendo China en Europa, que hace presuponer que también podrá haber otros capitales chinos interesados, pero no necesariamente de la empresa competidora. La estrategia o geo-política del litio es bien importante; es un producto escaso, pero que está en el centro de la reconversión de la industria automotriz mundial. También es muy importante para el programa del presidente de China la reconvertibilidad, quieren ser un actor muy importante en la electro-movilidad, que sin ser una tecnología de ultra punta, son baterías de litio, pero está buscando mayor duración».

«Julio Ponce hizo un esfuerzo muy grande al autorrestringirse»

-¿Por qué renunció Patricio de Solminihac? ¿Qué le parece su salida?

«Son ciclos históricos. Él hizo un gran aporte. Es la edad en que la gente empieza a tomar decisiones».

-¿Usted estaba de acuerdo con que Julio Ponce fuera asesor?

«Nadie va a negar que Julio Ponce es una persona muy controvertida, pero en el negocio del litio y la parte técnica de la producción es una de las personas que más saben en Chile. Ha podido traducir ese sello en hacer una empresa de grandes ventas y gran escala, pero a su vez muy simple, muy directa y muy eficiente. Se ha caricaturizado a Julio Ponce, se le ha demonizado. El tomó un acuerdo con Corfo, y no nos olvidemos que Julio Ponce hizo un esfuerzo muy grande al autorrestringirse él y a su familia, una situación inédita: siendo propietario de la empresa, asumió restricciones porque había un bien mayor que era la propia empresa, aumentar la cuota de litio. El acuerdo con Corfo, en el que yo participé, tuvo ese costo y es un costo grande».

-¿Eso no violaba el espíritu del acuerdo con Corfo?

«No, porque se hablaba de una asesoría acotada. Seamos realistas: él es un importante accionista de la empresa. Redujo sustancialmente sus derechos políticos; mantuvo sus derechos económicos. No ha sido solo un inversionista pasivo en la historia de Soqui. Él ha sido un constructor de esta empresa».

-¿Cómo ha sido su relación con Julio Ponce?

«Es muy profesional. Yo estoy en las cascadas con un trabajo profesional y siempre hemos buscado darle una estabilidad en el largo plazo a Soqui. Creo que los acuerdos con Corfo lograron eso. No veo que sea una empresa tan anómala o distorsionada como aparece ante la opinión pública».

-¿Siente que su reputación se ha visto afectada por asociarse con él?

«Uno no es ingenuo. Estoy muy satisfecho, por lo menos con el paso grande que se dio, que fue darle una viabilidad a una empresa de esta importancia. Construimos, a través del acuerdo con Corfo, donde Julio tuvo que pagar el costo principal. Pero por otro lado, le dio un respiro largo a una empresa muy importante. Naturalmente estoy en completo desacuerdo con las nacionalizaciones del litio y toda esa otra postura, que so pretexto del castigo a Ponce, tiene ideas muy trasnochadas sobre la gestión empresarial de los recursos naturales».

(ElMercurio)