La investigación, a cargo del fiscal adjunto de Rancagua, Francisco Caballero, contempló la denuncia de al menos 48 víctimas, todas quienes sindicaban al imputado como la persona que los había estafado luego de ofrecerles trabajo en el rubro de la minería.

De acuerdo a los antecedentes de la indagatoria, el ahora condenado, Osvaldo Paiva Marín tomaba contacto con las víctimas explicándoles que era el encargado de reclutar trabajadores para diversas faenas mineras en el norte del país, ofreciendo con ello trabajos cuyas remuneraciones podrían superar incluso el millón de pesos.

Para ello el imputado solicitaba le fueran depositadas diversas cantidades de dinero para la realización de falsos exámenes médicos o preocupacionales, que según él eran requisito para conseguir el empleo que jamás llegó, pues todas estas gestiones fueron falsas.

Fue así que hubo personas que perdieron entre los 30 mil hasta los 400 mil pesos cada uno, sumando en total cerca de 4 millones de pesos en lo defraudado.

Por tal motivo el fiscal, en procedimiento abreviado, logró que el Tribunal de Garantía lo condenara a una pena efectiva de cárcel de 2 años y 6 meses como autor de 48 delitos de estafa.( El Tipògrafo)