La abundancia de sol en el Desierto de Atacama dará vida a un ambicioso proyecto de 30 familias jóvenes de la Comunidad de Santiago de Río Grande, quienes decidieron apostar por la agricultura en el sector de Hierbas Buenas. Se trata de la impulsión de agua con energía fotovoltaica desde un estanque acumulador a uno auxiliar, para luego reimpulsarla a una última piscina de mil 100 metros cúbicos que distribuirá el recurso a los predios de estos beneficiarios, dando así vida a frutales, hortalizas y quínoa.Una idea apoyada por diferentes entidades vinculadas a la comuna de San Pedro de Atacama que es una verdadera transformación agrícola en terrenos baldíos y que se suma a otras iniciativas en Calama y Lasana apoyadas por el Programa de Riego Asociativo de Indap. Una gestión en riego que desarrolló el organismo de fomento agrario, en el alero del concepto de Operación Temprana y que busca de la mano de la tecnología e innovación, mantener la agricultura existente y proyectarla al futuro, demostrando que querer es poder.La directora de Indap de la región de Antofagasta, Jannette Araya, destacó este esfuerzo gubernamental en un año de desaceleración de la economía chilena, que busca dar respuesta a las necesidades de los agricultores que se abren posibilidades en su territorio, manteniendo sus costumbres y tradiciones. Fue así que la autoridad del agro regional enfatizó la estrategia implementada en la priorización de estos proyectos de riego, que considera un fomento económico incluyente con énfasis en mujeres, jóvenes, pueblos originarios y medio ambiente.Un trabajo que realiza el ministerio de Agricultura, a través de Indap en una región que posee el 95% de los usuarios y usuarias pertenecientes a alguna etnia, por lo cual todos los esfuerzos que se realizan responden a un alto componente de carácter indígena.( SoyChile)