La energía solar se presenta como una de las fuentes de energía renovable clave de cara al futuro. Y nuestra región, sobre todo su amplio desierto, es un escenario fértil para fortalecer esta industria.
A principio de octubre los medios de comunicación nacionales informaban que la energía solar sería una nueva fuente que proveerá de energía al Sistema Interconectado del Norte Grande. Se trata del complejo Pampa Dos Cruces, que es capitales chinos, y se ubica entre los valles de Lluta y Azapa, en la vecina Región de Arica y Parinacota.
La inversión de esta planta energética no es menor, pues sus costos alcanzan los US$ 100 millones, generando 45 MW y es una parte de una serie de varios proyectos que se implementarán tanto en el norte, como el resto del país.
Pero ¿qué es la energía solar? Se trata de una energía renovable, que se obtiene a partir del aprovechamiento de la radiación electromagnética procedente del Sol. Por lo mismo, corresponde a una fuente clave al momento de pensar en un futuro donde el agua se hace escasa y sobre todo, la necesidad de producir energía limpia es cada vez una exigencia para las naciones desarrolladas.
Pese a lo bueno que se pinta la energía solar, ésta tiene algunos pro y contras que es necesario reconocer.
Dado que la gran cantidad de superficie que exigen las plantas de energías solar es uno de los factores que juegan en contra de ella, nuestro territorio en la región se presenta como terreno fértil para la construcción de nuevas generadoras de energías como éstas. Por ello, que Tarapacá y todo el desierto, se presenta como un escenario clave para esta industria de la generación de energía renovable.
Acá una breve gráfica que nos explica el cómo funciona este tipo de energía.
Fuente: El Boy al Día