Su total rechazo a una eventual postergación de la agenda de descentralización por parte de este Gobierno realizaron impulsores de la regionalización, luego que parlamentarios de la Nueva Mayoría y legisladores socialistas como Carlos Montes y Osvaldo Andrade hablaran de “priorizar” la agenda del Ejecutivo, dando más espacio a reformas como la laboral y educacional, y aplazando otras como esta agenda. Más aún en un ambiente económico débil.
Uno de los más críticos fue el ex presidente de la Comisión asesora presidencial en descentralización, Esteban Valenzuela, quien aseguró que la instancia que dirigió hizo 70 propuestas “muy pragmáticas, por tanto, no es excusa ni el tiempo ni la plata para postergarlas”.
De hecho, puntualizó que ninguna de las iniciativas se ha materializado en un proyecto de ley, a pesar de que las conclusiones fueron entregadas en octubre de 2014 a la Presidenta Bachelet. Sólo la elección de intendentes – que fue ingresada al Congreso en diciembre pasado- conlleva algo de sus propuestas.
Valenzuela precisó que las regiones tienen “un riesgo en la falta de dinamismo e inversión, en la falta de transporte y conectividad, de un rol más potente y empoderado para que las platas del royalty minero o de desarrollo productivo no se gasten en puras consultorías, sino que tenga impacto en las comunidades”.
Apoyó esta visión el senador por la región de Atacama, Baldo Prokurica (RN), quien aseguró que este es un Gobierno “que no cree en la regionalización”.
Destacó que hay “un retraso importante en los compromisos que la Presidenta adquirió con las regiones durante su campaña. Son muy pocos los que se han cumplido”. Entregó como ejemplo que en Atacama, a más de 100 días del aluvión, “recién se terminó de pagar el Bono Enseres, en un escenario donde a la gente se le ofrecen soluciones para dos años en el tema habitacional. Si esta tragedia hubiese ocurrido en Santiago, seguro los problemas de la gente ya se habrían solucionado”.
Otra crítica provino del senador Pedro Araya (IND):“Estamos bastante preocupados porque no se ha avanzado mayormente en regionalización. De hecho están detenidos proyectos de elección de intendentes y transferencias de competencias a consejeros regionales. Tampoco ha habido claridad de si se van a transferir mayores recursos a los Gobiernos Regionales”.
Acotó que “las regiones no pueden seguir esperando porque hay una necesidad de avanzar en su desarrollo en todos sus ámbitos”.
Miriam Chible, consejera por Aysén que integró la comisión asesora, también criticó: “Hay decepción entre muchos de los integrantes de la comitiva, incluso nos sentimos utilizados, porque al parecer es solución para el Gobierno hacer comisiones para dilatar los problemas”.
Agregó que si bien puede haber presión para priorizar uno u otro tema, eso no justifica el retraso: “El resultado ha sido cero. Se ha perdido plata de todos los chilenos. Hay desilusión en las regiones”, concluyó.( Pulso)