Una previa de lo que se espera sea hoy la junta de accionistas de Enersis se vivió ayer en Endesa Chile, cita que estuvo encabezada por el presidente del directorio de la generadora con operaciones en cinco países, Enrico Viale, acompañado del gerente general Valter Moro.

Uno de los principales cuestionamientos vino del representante de Moneda, Rodrigo Mora, quien dijo tener serias dudas sobre el proceso de reorganización planteado por la italiana Enel, tema que sólo fue someramente tocado en las intervenciones previas tanto de Viale como de Moro.

“Quiero plantear mi preocupación por el programa de reorganización. Imagino que el gerente general de Endesa Chile  ha venido 14.000 kilómetros desde Roma, para venir a ser un gerente de una empresa multinacional latinoamericana. Y no para ser el gerente general de la división Chile. Quiero plantear mi preocupación de cómo va a ser ese proceso de reorganización”, dijo en la junta el representante de Moneda, quien recibió aplausos de los presentes tras su intervención.

Mora fue el segundo accionista en manifestar sus reparos al plan, pues antes que él otro propietario tomó la palabra para dar a conocer su preocupación sobre este negocio.

“Hicimos una comunicación y lo vamos a ver en el directorio. Por supuesto la regla que vamos a poner es crear valor para los accionistas”, dijo Valter Moro en respuesta al cuestionamiento de Moneda.

“Nos hemos enterado a través de un hecho esencial de Enel de un proceso de reestructuración societaria, los señores directores deberán analizar si someten a estudio esta proposición”, añadió el ejecutivo tras la junta en conferencia de prensa.

Otro punto que fue cuestionado en la asamblea fue el lento ritmo de inversiones que está teniendo Endesa Chile, la principal generadora del país con el 32% del mercado, pero que hoy está relegada a un rol secundario frente a otros actores que están desarrollando iniciativas más ambiciosas. Cabe consignar que la filial de Enersis sólo está levantando el proyecto hidroeléctrico Los Cóndores, de 150 MW, mientras que la cartera completa de iniciativas en construcción en el país supera, según cálculos del Gobierno, los 3.500 MW.

“Enel tiene prestigio por ser una compañía sustentable, pero en una empresa moderna eso es el desde. Si ustedes encontraron una empresa desastrosa, como los problemas ambientales con el proyecto Bocamina II o en el proyecto El Quimbo, es problema de los (ex) controladores que están en Madrid. Lo que me deja preocupado es que se habla de los proyectos que se están haciendo pero la verdad es que son proyectos que están terminando. El único proyecto relevante es Los Cóndores. Y para una cartera de 16.000 MW que tiene Endesa en Latinoamérica eso es apenas el 1%. Entonces yo me pregunto si el ánimo de ustedes va a seguir siendo construir centrales o no van a construir nunca más una central”, añadió el representante de Moneda.

Otro punto de debate fue la existencia de negocios de compra y venta de energía entre Endesa Chile y Enel Green Power, filial renovable de la italiana que en Chile desarrolla proyectos principalmente eólicos. Al respecto, Enrico Viale destacó que se trata de un negocio con uno de muchos actores que se acercan a vender energía en base a generación renovable, en el que se divide el riesgo y se toma la decisión pasando por todas las instancias correspondientes, entre ellas el directorio.

La empresa también debió responder a los cuestionamientos por el pago hecho a Tecnimont luego de que ambas firmas llegaran a un acuerdo que despejó la polémica por las boletas de garantía cobradas en 2013 a la constructora por fallas detectadas en la central Bocamina II.

Finalmente, Moro se refirió a una investigación interna por pagos para campañas electorales. Según reveló, se detectó pagos en 2013 por un total de US$1.000.000 para la campaña presidencial de ese año, sin revelar a quién fueron dirigidos esos recursos y asegurando que se trata de platas entregadas 100% dentro de la legalidad.( Fuente: Pulso )