Presentes dispares viven los principales proyectos mineros que se desarrollan en la zona, la mayoría de los cuales ha debido sortear largos y complejos procesos de aprobación por parte de la autoridad medioambiental, en los que, además, las comunidades se han ido involucrando con mayor protagonismo. Factor al que se suman los ajustes económicos que han implementado la mayor parte de las empresas, alertadas por el bajo valor del cobre.

Estructurales de codelco

A diciembre de 2015 el proyecto Mina Chuquicamata Subterránea (PMCHS), el más ambicioso en construcción, alcanzaba un 22,8% de avance en sus obras y una inversión de US$ 1.300 millones, de 4.200 totales. La obra, que recientemente presentó una serie de modificaciones a su Declaración de Impacto Ambiental (DIA), ya terminó sus trabajos tempranos y hoy alista los de infraestructura.

Por su parte, el otro proyecto estructural de la estatal en el Distrito Norte, RT Sulfuros, obtuvo su aprobación ambiental el pasado 20 de enero. Desde esa fecha, y por espacio de 30 días, procede el recurso de reclamación, lo que dará paso a la construcción de la iniciativa que tendrá un costo cercano a los US$ 5.300 millones.

Centinela de amsa

El proyecto de crecimiento denominado Desarrollo Minera Centinela (DMC), de Antofagasta Minerals, está actualmente en evaluación medioambiental por parte de las autoridades competentes. Estudio de Impacto Ambiental (EIA), que fue ingresado en mayo de 2015. Una vez aprobado, el proyecto tendrá una primera etapa de US$2.700 millones, en la que se espera sumar a la actual operación dos nuevos rajos, Esperanza Sur y Encuentro Sulfuros, una nueva planta concentradora y un depósito de relaves espesados adicional.

Una vez construido DMC, la empresa espera aumentar a más del doble la capacidad de procesamiento de mineral.

Sierra gorda

Propiedad de KGHM (55%), Sumitomo Metal Mining (31.5%) y Sumitomo Corporation (13.5 %), Sierra Gorda SCM ingresó al Servicio de Evaluación Ambiental la segunda etapa de su proyecto, lo que permitiría elevar su producción de 190 a 220 toneladas de cobre al día. Sin embargo, la iniciativa «Optimización Proyecto Sierra Gorda-Área Mina Planta» sufrió un revés luego de recibir observaciones de once de los veinte servicios públicos consultados.

«La importancia de la información omitida es tal, que su ausencia no es susceptible de ser subsanada mediante aclaraciones, rectificaciones o ampliaciones posteriores y, por lo mismo, resulta imposible continuar la evaluación ambiental», argumentó el rechazo el Servicio de Evaluación Ambiental de Antofagasta (SEA).

Rockwood lithium

El proyecto «Modificaciones y Mejoramiento del Sistema de Pozas de Evaporación Solar en el Salar de Atacama», de Rockwood Lithium, es otro de los que recibió su aprobación ambiental recientemente, y ahora espera por un periodo de reclamación de 15 días. ( El Mercurio de Calama)