El mal momento que atraviesa el sector minero, con caídas de productividad y un bajo precio del cobre, tendrá un efecto importante en las finanzas públicas de la región durante 2016.

El Ministerio de Hacienda está pronosticando para el próximo año menores recaudaciones por Impuesto Específico a la Minería («royalty») y por patentes mineras (Ley 19.143), que representan dos importantes vías de financiamiento para proyectos locales.

La merma en ambos fondos repercutirá en el presupuesto del Gobierno Regional (FNDR), pero también amenaza a los municipios, que son receptores directos o indirectos de los mismos recursos.

Patentes

Por patentes mineras, el Ministerio de Hacienda está calculando transferir a los gobiernos regionales $27.746 millones durante 2016. Esto es, $449 millones menos que en 2015.

En el caso del Gobierno Regional de Antofagasta, que es el que más recibe debido a la gran relevancia de la industria en la zona, los ingresos pasarán de $10.898 millones en 2015, a $10.595 millones en 2016, es decir, se registraría una disminución de $303 millones.

Considerando que por ley las municipalidades captan el 50% de lo que se recauda por patentes mineras, el monto que éstas recibirán el próximo año debiera ser similar al que se distribuye a los gores.

Aún así, municipios consultados dijeron estar proyectando para 2016 recaudaciones similares a las de este año.

La municipalidad de Antofagasta, por ejemplo, estima recaudar $2.160 millones por patentes mineras, idéntica cantidad a la percibida este año.

«Royalty»

Sin embargo, el golpe más claro a las finanzas locales viene por el lado del Fondo de Inversión y Reconversión Regional (FIRR), que se alimenta del impuesto específico que paga la gran minería.

Hacienda anticipa para 2016 una baja histórica de 46,1% en este fondo, que pasará de $60.723 millones en 2015, a $32.748 millones en 2016.

Nuevamente por ser la Región de Antofagasta una de las que tiene mayor participación en la actividad, será una de las zonas más afectadas.

Se calcula que de los $6.659 millones que se recibieron por FIRR este año, se pasará a sólo $3.364 millones en 2016, es decir, el Gobierno Regional contará con $3.051 millones menos para proyectos (baja de 50%)

El FIRR es un fondo que se entrega directamente a los gobiernos regionales para el financiamiento de «obras de desarrollo», pero la ley también contempla la posibilidad de realizar transferencias a los municipios para los mismos fines, ya sea desde los gobiernos o la Subdere.

Inquietud

La consejera regional Sandra Pastenes interpretó los nuevos datos como una demostración de que todavía no existe total certeza de lo estrecho que será el presupuesto en 2016.

Comentó que información recogida hace pocos días en Santiago apunta a que efectivamente habrá una reducción de las partidas que se alimentan de la minería, pero también de otras que no tienen relación con esta actividad.

«En este contexto se hace aún más urgente que como Consejo Regional definamos las prioridades de 2016, considerando que el presupuesto está en baja», manifestó.

Por su parte, el senador Pedro Araya, aclaró que las cifras del Ministerio de Hacienda son «estimaciones» (se pueden mover al alza o a la baja), pero aún así las consideró inquietantes.

Para el parlamentario es importante que el Ejecutivo tome nota de los recortes que sufrirán los fondos locales y entregue mayores recursos por la vía de los suplementos presupuestarios.

«Eso es algo que hemos venido solicitando hace semanas y que ahora adquiere mucha mayor urgencia», apuntó.

«En este contexto se hace aún más urgente que como Consejo Regional definamos las prioridades de 2016, considerando que el presupuesto está en baja».

Sandra Pastenes, Consejera regional