AGUA MARINA EN LA GRAN MINERÍA: OPORTUNIDAD PARA NUEVOS SUPRESORES

La oportunidad del agua marina con aditivos avanzados para el control de polvo

 

La mayor producción de cobre esperada para fines de esta década, harán que el uso de agua de mar    por parte de la minería del cobre aumente en 230% al 2029 (Cochilco, 2018). Con ello se intensificará el uso de salmueras para el riego de caminos para el control del polvo,    lo cual es una excelente oportunidad para líneas de aditivos avanzados como los copolímeros DMS® de ABCDust que combinados y agregados en mínimas cantidades obtienen supresiones superiores al 94% de Material particulado MP10-2,5.
El estudio desarrollado por la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco), evidenció que la demanda de agua de mar del sector pasará desde 3,28 m3/seg en 2018, a 10,82 m2/seg en 2029, alcanzando con ello el 43% del agua total requerida por dicha industria en ese año. Excelente noticia para la línea de supresores DMS, la cual potencia el uso del agua salada para el control de polvo, estabilización y conservación de los caminos.

ABCDust – Potenciando la higroscopia del agua marina:   

La combinación de polímeros DMS (1) aprovechan y complementan la higroscopia del agua salada, (2) aglutinan y ligan partículas finas aumentando densidad, resistencia  y uniformidad a la carpeta, mejor flexibilidad y firmeza, (3) conservan  la humedad óptima, lubricando el roce entre partículas, y minimizando pérdida de finos, y (4) reducen la corrosión típica de un tratamiento intensivo y saturado de sales.  El resultado combinado es un camino con excelentes condiciones de conservación, con una supresión del polvo del 94 -98% y reducción de los riegos en un 80-90%, ahorrando horas de camión cisterna y obteniendo una mayor productividad de la red de caminos.

Complementariamente, para mantenimiento de grandes redes viales, nuestro equipo experto, realiza un diagnóstico para determinar el modelo y protocolos de desempeño óptimo de dosificaciones para aplicar y conservar los tratamientos de manera geolocalizada en cada tramo del circuito de caminos. Para esto, se integran múltiples variables dentro de modelos de deterioro y sistemas de monitoreo del MP10-2,5; fricción, niveles de regularidad, %finos, %sales y condiciones del camino y el medio.

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