En la era de los automóviles eléctricos y los smartphones, los acuerdos con SQM y Albermarle, así como el posible arribo de Tesla, constituyen movimientos claves para que el país lidere el mercado mundial del litio
A unos 270 kilómetros de Antofagasta, en pleno Norte Grande, se extienden tres mil kilómetros cuadrados del Salar de Atacama. Escenario que en sus profundidades oculta un lago por medio de una gruesa capa de sal, la cual contiene uno de los mayores depósitos a nivel mundial de litio.
Chile, de hecho, posee 7,5 millones de toneladas y alrededor del 52% de las reservas mundiales del mineral en forma de salmueras. Cifras que estiman enormes perspectivas futuras en el país, especialmente en la exportación de carbonato de litio.
Al respecto, Mario Grágeda, director del Centro de Investigación Avanzada del Litio y Minerales Industriales (Celimin), proyecta que para el año 2035 habrá una producción de 665 mil toneladas anuales de carbonato de litio, de los cuales 35% se va a utilizar en baterías para autos eléctricos.
ACUERDOS
Dado el contexto de creciente demanda por el mineral es que los apretones de manos con SQM y Albemarle constituyen llaves que abren puertas de oportunidades en el futuro. De hecho, estos contratos con Corfo para explotar el “oro blanco” en el Salar de Atacama aportarán unos US$982 millones a la Región de Antofagasta entre 2018-2030.
De ese total, la Corporación de Fomento especifica que la modificación del contrato con SQM significará aportes por US$717 millones para la región, en tanto que la empresa Albemarle entregaría US$265 millones a las comunidades atacameñas de la zona.
“Los desafíos que se abren para el litio en la región pone sus focos en el desarrollo económico que le permitirá llegar a la gente con soluciones. Es así que todo lo que podamos hacer en contribuir a que estos proyectos se puedan materializar, significando con ello una mayor inversión y empleo, son pasos importantes para la región y el país. Aquí también pongo los énfasis en el rol de las universidades e institutos profesionales, sobre todo, en orientar la formación de sus carreras y de sus investigaciones en estas áreas que hoy se están abriendo como oportunidades», comenta el seremi de Minería, Humberto Burgos.
“Además, si llegara a materializarse la llegada de Tesla no sólo sería un consumidor directo del litio, sino también va a generar el encadenamiento productivo y la transferencia tecnológica que necesita el país”, complementa.
POTENCIAL EXPORTADOR
El litio tiene variados usos, factor que, si se suma a los planes de expandir de forma exponencial la extracción de litio a medida que los combustibles fósiles vayan perdiendo su protagonismo por las prioridades medioambientales a nivel global, hacen surgir la pregunta si el “oro blanco” podría en este siglo llegar a convertirse en la principal exportación de materias primas en Chile, superando incluso al cobre.
Domingo Ruiz, académico de la Universidad de Santiago de Chile (Usach) precisa que el volumen actual de exportaciones de litio está lejos de competir en ventas con el metal rojo. “Como ejemplo, el 2011 Chile exportó US$43.599 millones en cobre y sólo US$204 millones de litio. Aunque ya para el 2017 las exportaciones de litio aumentaron a US$418”.
En tanto, la investigadora del Centro Regional de Estudios y Educación Ambiental (Crea), Ingrid Garcés postula que a Chile le convendría diversificar su matriz. “¿Cuánto es lo que renta la extracción y venta de carbonato de litio? Supongamos que uno. En cambio, si saltas a componentes manufacturados se amplifica por cuatro y si vas a producir celdas y montaje de baterías de litio para automóviles, eso es multiplicado por 20. De hecho, Garcés afirma que, si esta diversificación apuntara a insumos para batería que añaden mayor valor agregado, eso significaría la existencia de variadas empresas asociadas, con más puestos de trabajos.
PANORAMA TESLA
La tendencia en el mundo dirige sus pasos hacia el reemplazo de los combustibles fósiles por la energía eléctrica. En línea con ello, los analistas subrayan que los precios de paquetes de baterías han caído alrededor de un 80% desde 2010, por lo que los autos eléctricos y sus equivalentes a bencina podrían alcanzar precios similares dentro de una década.
Vemos entonces que “para el año 2027 se estima que unos 27 millones de vehículos eléctricos estarán en las vías, frente a los tres millones existentes en 2017”, destaca la directora ejecutiva del Centro de Estudios del Cobre y la Minería (Cesco), Alejandra Wood.
Por ello, Tesla Motors podría oficializar su llegada a Chile para construir una planta procesadora para producir litio de alta calidad que, de concretarse, se trataría de la primera instalación de este tipo en Latinoamérica. Esto gracias a un acuerdo con SQM, lo cual permitiría que la gigante automotriz obtenga litio para las baterías de sus autos eléctricos.
Es así que las negociaciones de la compañía de Elon Musk con Chile no sólo ponen sus focos en la planta de procesamiento, sino que también añadiría la producción de cátodos de batería con el objetivo de incorporarlos en los vehículos eléctricos.
Cabe señalar que estas negociaciones tienen como escenario de fondo la producción de su primer auto eléctrico para el mercado masivo por parte de Tesla.
Fuente: soychile.