La compañía quiere aprovechar unos precios récord impulsados ​​por la creciente demanda de baterías de iones de litio utilizadas en vehículos eléctricos. El mercado especula que los precios podrían comenzar a bajar en unos años después de que Soquimich recibiera el visto bueno en enero para ampliar la producción.

Sigma Lithium Resources se está preparando para salir a bolsa este mismo marzo. La compañía espera comenzar la producción del metal utilizado en las baterías recargables el año próximo, antes de que la nueva oferta de Chile llegue al mercado.

La empresa canadiense con proyectos de litio de roca dura en Brasil está planeando una adquisición inversa, una estrategia para cotizar en bolsa en la que una empresa privada compra a otra compra ya cotizada, evitando así las tasas relacionadas con una oferta pública inicial.

Sigma quiere recaudar entre $25 millones y 30 millones de dólares canadienses (US$20/27 millones) inicialmente, y un total de $85 millones de dólares canadienses este año, de acuerdo con un plan para comenzar a aumentar la producción en 2019, dijo la directora de Sigma Ana Cabral en una entrevista telefónica. La compañía quiere aprovechar unos precios récord impulsados ​​por la creciente demanda de baterías de iones de litio utilizadas en vehículos eléctricos. Los precios podrían comenzar a bajar en unos años después de que SQM recibiera el visto bueno en enero para ampliar la producción.

«Debido a la alta demanda de los automóviles eléctricos, hay una escasez de litio», dijo Cabral desde Toronto. «Hasta que Chile aumente la producción en 2023, 2024, esa escasez puede continuar. Los que tienen reservas de litio ahora tienen poder para negociar».

Después de la adquisición inversa, Sigma quiere tener alrededor de un capital flotante de aproximadamente el 15 por ciento. Se espera que se fije un precio para las acciones en la segunda semana de marzo, dijo Cabral.

En la actualidad, la empresa brasileña de inversión A-10 es propietaria del 80 por ciento y los ejecutivos de Sigma son dueños del resto. Después de la adquisición inversa, A-10 probablemente será propietaria del 65 por ciento, los ejecutivos de Sigma de un 10 por ciento y un grupo canadiense que ya compró obligaciones tendría un 8 por ciento, dijo Cabral.( El Mostrador)